Nutricionistas de Zaragoza dicen que cuando se trata de la fructosa, un componente comúnmente presente en las frutas, es importante cuestionar si realmente es tan saludable como comúnmente se cree.
Aunque ha sido elogiada por no elevar los niveles de azúcar en sangre a corto plazo y por encontrarse de forma natural en la fruta, la creciente evidencia sugiere que su consumo excesivo puede tener consecuencias perjudiciales para nuestra salud.
Cuando se consume en grandes cantidades, la fructosa tiene muchas similitudes con el alcohol, especialmente en términos metabólicos.
El 100% de este azúcar, se dirige directamente al hígado para ser metabolizado.
Uno de los motivos por los cuales puede ser hepatotóxico cuando sobrecargas tu hígado es este, algo similar ocurre con el alcohol.
La grasa visceral, la resistencia a la insulina o el síndrome
metabólico son algunos de los efectos que la fructosa y el etanol comparten.
Cuando hablamos con personas sobre sus hábitos alimenticios, normalmente cuando comen frutas en grandes cantidades va acompañado con “yo como saludable”.
Sigue leyendo en el sitio oficial si estás interesado en conocer como seguir una dieta saludable.